Ahí estás un día más, frente a frente con tu plato preferido, puedes sentir su olor, sabor y textura grabado en tu cerebro incluso antes de dar el primer bocado.
¿Sabes todo el proceso que han tenido que pasar esos alimentos para que tú los disfrutes?
En cada una de estas etapas se liberan gases de efecto invernadero (GEI) que en mayor o menor medida tienen consecuencias para el medio ambiente.
Pero para entender bien el proceso vamos a definir qué es exactamente la huella de carbono.
La huella de carbono representa el impacto que tiene sobre el clima el desarrollo de una actividad, es decir, la cantidad de emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) emitidas de forma directa, o indirecta como consecuencia del desarrollo de una actividad, medido en toneladas de CO2 equivalente.
Por ello su cálculo resulta fundamental para poder trazar un plan de reducción medible cuantitativamente.
De hecho los últimos datos alertan de que la agricultura y ganadería producen aproximadamente el 20% de estos gases siendo solo superado con un 47% por el sector energético, y se advierte de que estas cifras van en aumento.
Algunos ejemplos que hemos encontrado para que te hagas una idea es la preparación de un potaje, pues bien, en su realización son necesarios unos 5450 km frente a los 7000 km necesarios para un chuletón de ternera.
Precisamente la ternera es el alimento más contaminante al generar altas emisiones de CO2 y necesitar un alto consumo de agua (15.000 litros de agua para producir 1 kg de carne), junto con los químicos necesarios para cultivar el pasto que necesitan y los antibióticos para su cría.
Con esto podemos afirmar que si en una dieta media reducimos la cantidad de carne roja y procesada y aumentamos el consumo de frutas y verduras podemos reducir un 17% las emisiones de GEI y casi un 40% el consumo de agua.
En lo referente al consumo de pescado podríamos hablar largo y tendido de la sobrepesca y acuicultura, pero eso lo dejamos para un futuro post.
No podemos olvidarnos en la dieta actual de la amplia gama de productos procesados y “alimentos milagro” con mil nombres estrambóticos que como mínimo nos convierten en inmortales. O de los alimentos del futuro de los que hemos oído hablar últimamente como es el caso de la carne sintética.
Como curiosidad deciros que el secreto de esta” carne “radica en la hemoglobina obtenida a partir de la soja vía síntesis de un gen al que le añaden levadura para evitar utilizar cantidades ingentes de la planta.
Además para los amantes del vodka y el medio ambiente Air Company ha logrado producir el primer vodka del mundo con una huella de carbono negativa,ya que su elaboración se basa en los mismos principios de la fotosíntesis en las plantas.
En conclusión deberíamos ir pensando en consumir alimentos que tengan un bajo coste ambiental en cuanto a recursos ambientales (incluída el agua) y cantidad de GEI producido durante su proceso.
Desde aquí os animamos a consumir productos de temporada y locales para hacer un mundo más happy….y ya sabéis verde que te quiero verde. Para ello sigue nuestras recetas y convierte tu día en un poco más Vegeta, por tu salud , por los animales y por el medio ambiente.
VHappy my friend 😉
Super interesante, Enhorabuena!!!
Me han encantado!! Lo comparto con todos mis contactos! Gracias!!!